Fuente: El Faro Luz y Ciencia, miércoles 27 de mayo de 2020, CDMX.
Escrito por: Alan Gerardo Méndez Solís* Miembro de la Red Juvenil El Faro/Agenda 2030.
La informalidad, el desempleo y las violaciones a los derechos humanos, son las otras enfermedades que arrastra la pandemia COVID-19, y sin descanso, los Agentes de Cambio del Objetivo de Desarrollo Sostenible 8: Trabajo Decente y Crecimiento Económico de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, abren la puerta en defensa de los que quedarse en casa, no es un opción.
Los invitamos a conocer al Agente de Cambio, el Mtro. Carlos Alejandro Martiarena Leonar, Director de Área de la Quinta Visitaduría General de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México.
El Maestro Martiarena es Licenciado en Derecho por la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México UNAM, es Maestro en Derechos Humanos y Democracia por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales FLACSO, asimismo, cuenta con múltiples capacitaciones en derechos humanos y ha escrito diversos artículos académicos en materia de debido proceso y libertad de expresión. Dentro de los cargos que ha desempeñado destaca como Director de Área de la Comisión Ejecutiva de Atención Víctimas y actualmente es Director de Área de la Quinta Visitaduría General (5ta VG) de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México CDHCM, misma que se encarga de la protección a los derechos humanos en materia laboral.
Conoce: Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México
Con la llegada de la contingencia por el COVID-19, también se presenta un panorama complicado para la protección de los derechos laborales y con ello para el cumplimiento del ODS 8. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), para diciembre de 2019 casi 2 millones de personas en México se encontraban desempleadas, y pronosticó que para 2021 esa cifra aumentará considerablemente. Ya había informado la Secretaría del Trabajo y Previsión Social que se perdieron más de 346,000 empleos formales entre el 13 de marzo y el 6 de abril de este año.
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Ante el contexto ya mencionado, entrevistamos al Mtro. Carlos Martiarena para que nos hable de los retos que enfrenta el sistema mexicano en materia laboral y nos oriente hacia posibles soluciones.
«Uno de los retos es salvaguardar sus fuentes de empleo, desafortunadamente hemos visto que ha habido una disminución de las actividades, sobre todo en el sector privado y han surgido algunos recortes de personal, con disminuciones no concertadas entre los patrones y los trabajadores de los salarios y prestaciones» comentó el Mtro. Martiarena.
También es imperante cuidar las condiciones de aquellos trabajadores esenciales, ya que se encuentran en constante riesgo ante la coyuntura actual, «algunas personas que trabajan como personal de salud: médicos, enfermeras, trabajadores sociales y trabajadores de limpieza señalan la falta de insumos para poder realizar sus actividades… se enfrentan en muchas ocasiones a comprar sus propios insumos, en un situación de riesgo por no contar con las medidas de bioseguridad necesarias… piden mejores condiciones». Aunque el Gobierno de México ha trabajado arduamente por proveer los insumos, el aumento de casos de COVID-19 afecta directamente a la disponibilidad de los centros de salud y a su personal. Debemos ser concientes, por lo tanto, #QuedémonosEnCasa.
Si bien, los trabajadores esenciales son un punto clave, no podemos olvidar a la totalidad de personas que se encuentran laborando en otros rubros, «es importante que los trabajadores que están desarrollando sus actividades en casa también cuenten con las condiciones y las circunstancias idóneas», añadió el Director de Área de la 5ta VG.
Por otro lado, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, en México el 54.3% del total de la Población Económicamente Activa (PEA) se encuentra en el empleo informal, ante esto el Mtro. Carlos enfatizó sobre la importancia de la protección de los derechos humanos en el empleo informal: «hemos visto que un alto porcentaje de las personas desarrollan algún tipo de trabajo en la economía informal, sobre todo en países en vía de desarrollo». La mayoría de estas personas laboran en condiciones precarias y no cuentan con seguro o protección alguna y «se enfrentan a esta situación …de no poder desempeñar sus actividades … eso los coloca en una situación mucho más grave de vulnerabilidad, además hay otros sectores … como las comunidades migrantes, los indígenas o personas adultas mayores».
Otra área de mejora es la capacitación en derechos humanos a los elementos de seguridad pública, con el fin de evitar las violaciones a los mismos «he observado que ha habido operativos para evitar la instalación de estos mercados públicos … muchos de los casos tienen que ver con retiros de mercancía o de enseres que ofertan … lo hacen de una manera arbitraria», agregó el Mtro. Martiarena.
Debemos ver todos estos factores como una oportunidad de mejora y crecimiento, esto nos permitirá acercarnos al cumplimiento del ODS 8, ante esto, el Mtro. Martiarena apuntó algunas posibles mejoras: «debe de haber programas de apoyo en específico a estos grupos o sectores de comerciantes que tengan necesidades mayores, sobre todo para personas que tengan cierta situación de vulnerabilidad… los Gobiernos nacional o subnacionales pueden implementar políticas gubernamentales para que, una vez finalizada la pandemia se pueda atender la economía informal».
Pero ¿qué características se deben tomar en cuenta al formular las políticas estratégicas? ¿Cómo podemos hacer para que las políticas públicas tengan la consistencia adecuada? Primeramente, escuchando y entendiendo la realidad de todos aquellos a quienes van dirigidas, aquellos que quedarse en casa no es una opción viable. Comer o morir.
«Por otra parte, es un factor a considerar la participación de la sociedad civil y de las organizaciones de trabajadores informales para que puedan contribuir a buscar alternativas. En ese sentido es de vital importancia la consideración de sus opiniones y discusiones … escucharlos porque a veces se tienen otras visiones desde los gobiernos y no engloban plenamente las necesidades de los afectados. Es por ello que es fundamental incorporar sus puntos de vista». Con esta reflexión finalizó el Mtro. Carlos Martiarena.
Aún hay tiempo de ajustar y mejorar las acciones ejercidas por parte de los gobiernos, de generar políticas públicas con un enfoque de derechos humanos, que consideren las opiniones, pensamientos y necesidades de los diferentes grupos a quienes van conducidas, para poder acercarnos día con día sin retraso, al cumplimiento del ODS 8 y eventualmente conformar plenamente el trabajo decente y crecimiento económico para México.
Twitter @alanjerry97
