Por: Doraisa González
Este 3 y 5 de marzo de 2018, empezó las sesiones anuales en Beijing del Decimotercero Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino CCPPCh y la Decimotercera Asamblea Popular Nacional APN, ambas denominadas las “Dos sesiones”, donde se reunieron más de 2 mil miembros del Comité y cerca de 3 mil diputados de la Asamblea.
La ANP, que es el máximo órgano de poder de China y la CCPPCh siendo el máximo órgano asesor político del país que promueve la democracia consultiva, hace de estas reuniones anuales, las más importantes para definir el curso político chino del año, actualmente, 2018, en el “Perro Madera”.
Durante las sesiones diputados y los miembros del partido de todo China cumplen con sus responsabilidades en el marco de la legislación democrática, la supervisión democrática, consultas políticas y la participación en la discusión así como gestión de los asuntos estatales.
Este año, es particularmente especial porque se cumple el 40° aniversario de la reforma y apertura de China, además, de entrar en una nueva ideología instaurada por el actual Presidente Xi Jinping sobre el socialismo con peculiaridades chinas en las “Cuatro Integrales” explicados en su libro “La gobernación y administración de China”. Todo en el espíritu del XIX Congreso Nacional del Partido Comunista Chino PCCh.
En la continuidad de cumplir sus metas para ser una sociedad modestamente acomodada, este 2018, se lleva a cabo el Décimo Tercer Plan Quinquenal para el Desarrollo Económico y Social de China.
Por otro lado, es en esta sesión, los más de 2,200 nuevos miembros de 2,980 del Comité y diputados de la APN, es decir casi el 75%, quienes desempeñan por primera vez funciones oficiales para la deliberación y administración de asuntos estatales, entre ellos, decidir a los líderes de los nuevos órganos estatales, y al nuevo Primer Ministro.
Todo, con el objetivo de complementar el sistema de gobernanza nacional y mejorar la capacidad de la gobernanza moderna, así como la propuesta, ya ratificada de modificar la Constitución en sintonía con las necesidades de la época.
Uno de los principales temas tratados, son eliminar las barreras en el sistema de funcionamiento de las instituciones del Estado y mejorar la eficiencia, de igual forma de generar reformas constitucionales para aplicar el Estado de Derecho, hecho que sucede por primera vez en 14 años.
Además, como cada año, se presenta el reporte del gobierno chino, donde establece las metas que giran en torno a los índices económicos tales como crecimiento del PIB, crecimiento del IPC, déficits financieros y la producción de cereales.
Uno de los nuevos puntos, son de las nuevas metas en desarrollo que planteará China en 2018 y que van de acuerdo, a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, en este incluye el nuevo Índice de Desarrollo Verde creado el año pasado.
Finalmente, uno de los puntos más destacados ante el mundo es el Nuevo Órgano Anticorrupción, tratado en la XVIII Comisión Central de Inspección Disciplinaria (CCID) del PCCh que se publicó en 2017, con ello, la APN debe deliberar y aprobar la ley de supervisión nacional, establecer la Comisión Nacional de Supervisión y elegir a los funcionarios de la Comisión.
Sólo el año pasado se atraparon a más de 240 funcionarios de la administración central y más de un millón de funcionarios de nivel bajo por haber violado las reglas del PCCh y del gobierno.
Respecto a la economía, China que se mantiene como el segundo líder, ha sostenido un nivel estable durante los últimos cinco años, gracias a su énfasis en la calidad y se han mostrado más tolerantes con la ralentización del crecimiento del PIB, en cual se espera siga en un crecimiento cercano al 6,5 por ciento.
«La economía china viene haciendo una transición desde una fase de crecimiento rápido hacia una etapa de desarrollo de alta calidad», señala un informe presentado al XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China en octubre de 2017.
Datos del Banco Mundial muestran que China aportó un 34 por ciento al crecimiento económico del mundo entre 2012 y 2016, superando el aporte combinado de Estados Unidos, la Unión Europea y Japón. Xi Jinping lo denomina “la nueva economía” de la mano de lo sostenible.
Asimismo, el libre comercio será otro tema, a tratar en las dos sesiones, que se espera haya más apertura, según lo expresado en el Foro Económico Mundial celebrado en enero del presente año, sin dejar de mantener “Una China, Dos Sistemas” al referirse a las ciudades como Shangai, Hong Kong y Macao.
El Ministerio de Comercio estima que, a lo largo de los próximos cinco años, China importará más de 10 billones de dólares de artículos y servicios, con unos 300 millones de personas que representan un 30 por ciento del total mundial, mientras que la inversión extranjera directa alcanzó en 2017 un récord de 878.000 millones de yuanes (140.000 millones de dólares) con un total de 35.652 empresas de capital extranjero inauguradas.
A pesar del creciente proteccionismo de Estados Unidos, China defenderá una «comunidad de futuro compartido para la humanidad», y seguirá promoviendo la globalización, que hoy en día se complementa con el gran proyecto de la Iniciativa de la Franja y la Ruta de Seda, donde no se descarta la participación de América Latina, de igual forma que en los BRICS -Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica-, que el año pasado, en Xiamen, fue invitado México como país emergente.
Sin embargo, Xi y los partidarios de su gobierno deberán tomar medidas para garantizar que China evite la “trampa del ingreso medio”, lo que pocos países en vía de desarrollo han logrado hacer.
El Presidente Xi Jinping, se ha enfocado en las reformas, con temas encabezadas por grupos dirigentes y comisiones que abarcan asuntos de hacienda y economía, la seguridad nacional, la seguridad en internet y la informatización, así como la integración entre lo civil y lo militar.
Añadido a lo anterior, durante el periodo 2013-2016, 55 millones de chinos abandonaron la situación de pobreza, lo que pronostica que cumplirán la meta de eliminar completamente la pobreza para 2020.
Xi Jinping hace énfasis en construir una ciudad orientada a la gente solucionando problemas como la superpoblación, la congestión vehicular, los altos precios de la vivienda y la contaminación ambiental, en coordinación con el desarrollo cinturón Beijing, Tianjin, Hebei, el ambicioso proyecto de integrar los más de 100 millones de personas.
Es algo único en el mundo que un partido político con 88 millones de miembros se acuerde alrededor y se unan para guiar a más de 1.300 millones de personas hacia un destino común que entregue beneficios no sólo a ellos mismos sino también a la gente de todo el mundo.
China ahora se presenta como el principal promotor de la cooperación, la gobernanza, el multilateralismo y la globalización.
Relaciones México y China
México y China cumplieron este 14 de febrero de 2018, 46 años de relaciones amistosas, donde los progresos y objetivos conjuntos han aumentado.
China que es el segundo socio comercial de México, tienen temas conjuntos desde los económicos como generar el ecosistema adecuado para tener una Acuerdo Económico o Tratado de Libre Comercio, sobre los vuelos, aranceles, visados y en turismo; como en lo relativo a el Estado de Derecho donde se comparte el interés por combatir la corrupción.
Hay asuntos pendientes como los derechos industriales, las normas fitosanitarias, así como inversión extranjera directa.
Sin embargo, hoy en día hay muchas plataformas de comunicación parlamentaria conjunta: la Comisión de Seguimiento Parlamentario al Acuerdo Marco de La Alianza Del Pacífico (CSPAP), Conferencia Parlamentaria de Asia-Pacífico sobre Medio Ambiente y Desarrollo (APPCED), la Unión Interparlamentaria, Organización Mundial de Parlamentarios contra la Corrupción (GOPAC).
De igual forma que las Naciones Unidas, por primera vez los BRICS y la Iniciativa de la Franja y la Ruta de Seda.
México está atento a las políticas resultantes de las “Dos Sesiones”, tanto por servir de aprendizaje, como en la forma de acciones entre las contrapartes.
Los miembros del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial de los Estados Unidos Mexicanos siguen de cerca los tópicos de: Anticorrupción, Estado de Derecho, ciencia y tecnología, desarrollo sostenible de ciudades, planeaciones gubernamentales y económicas; así como la apertura comercial.
En este Año del Perro de Madera, refleja alianzas más sólidas e integrales.